Una encuesta a 700 profesionales en formación de la Ciudad
mostró que casi la mitad trabaja entre 30 y 60 horas sin parar y el 82% sigue
luego de hacer la guardia.
"El Gobierno de la Ciudad precariza las residencias y
la salud pública, el régimen actual no sólo perjudica, cosifica y maltrata a
los propios residentes y concurrentes sino que pone en riesgo la salud de la
población", destacó el diputado Fernando Muñoz del Frente Progresista y
Popular quien junto a un grupo de médicos residentes presentaron ayer los
resultados de la encuesta realizada por la Fundación SIIC a 700 de los 3000
médicos en formación de la Ciudad de Buenos Aires. El evento "La salud de
los médicos residentes de la Ciudad de Buenos Aires" se llevó a cabo en la
Legislatura porteña.
Entre los resultados se destacan que el 49% trabaja entre 30
y 60 horas ininterrumpidas, el 45% realiza dos guardias semanales, el 82%
continúa trabajando después de su guardia, el 95% considera que las condiciones
afectan su desempeño laboral, y el 79% no goza de franco post guardia. A estos
datos alarmantes que demuestran condiciones miserables de trabajo se suman que
el 73% de los médicos residentes vivieron situaciones de violencia psicológica,
física o de género, el 85% padeció estrés, el 79% contracturas musculares, el
68% cefaleas, el 53% crisis de angustia y el 27% várices.
El diputado Fernando Muñoz hizo referencia también a su
proyecto de ley para modificar la ordenanza que regula las residencias. Entre
los cambios la iniciativa limita la cantidad de horas continuas de trabajo
determina que "el horario consta de nueve (9) horas diarias a ser
cumplidas de 8 a 17hs, con una hora de almuerzo, en cuatro días hábiles".
Además, se estipula que los residentes "realizarán como máximo por semana
24 horas de guardia supervisada", durante todos los años de la residencia
según se estipule en su programa. Además, formaliza el régimen de licencias y
descansos especiales, lo cual incluye la licencia por maternidad por 45 días
anteriores al parto y en los 60 días posteriores. La residente podrá optar por
reducir la licencia anterior al parto y compensarla con la posterior, siempre
que aquella no sea inferior a los 30 días.
En el texto del proyecto también se dispone de espacios
adecuados en los hospitales para el estudio y el descanso y establece la
autoridad de aplicación de este sistema de formación con trabajo.
"A los residentes se lo ve más como estudiantes por más
que ya sean profesionales. El desconocimiento de las licencias no se cumple y
cuando lo hacen, se las hacen compensar con horas de guardia. El régimen es
perverso e impacta sobre la salud pública", aseguró Muñoz en diálogo con
Tiempo.
Alejandro fue residente de psiquiatría en el Hospital Eva
Perón de San Martín. "Trabajábamos 35 horas seguidas porque teníamos la
jornada de 8 a 17 y luego la guardia hasta las 8 de la mañana y luego al otro
día no nos daban franco. Esto nos perjudica muchos aspectos cognitivos y
psicomotrices que afectan directamente a los pacientes. Por más entusiasmo que
tengamos en trabajar y darlo todo, somos seres humanos y no máquinas”.
Fuente: Tiempo Argentino
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